Dos bronces que saben a oro: logra NL dos terceros sitios2 min read

Las tenistas regias, Agustín Burroni y Jimena Ortiz, se crecen ante adversidades y recuperan terreno en Nacionales Conade 2023.

El tenis de Nuevo León retomó un escenario que había perdido al conseguir dos medallas de bronce que saben a oro en los Juegos Nacionales Conade 2023.

Ga Hyun Song en singles de 16 Años, y la pareja formada por Agustín Burroni y Jimena Ortiz, en dobles mixtos de 14 años, llegaron a Semifinales del torneo, con lo que se agenciaron la presea de tercer lugar.

El año pasado Nuevo León tuvo su peor actuación al quedar fuera del medallero en todas las categorías y modalidades, después de que en años anteriores al menos había conseguido una presea.

Sin embargo en esta edición, y después de que la Asociación Regiomontana de Tenis (ART) tomó el control del proceso selectivo, Nuevo León armó un equipo más competitivo que dio la pelea y logró unas preseas que no estaban pronosticadas.

Song, de ascendencia coreana, pero regia de nacimiento y quien entrena en el Centro Tenístico Nuevo León, cayó ante la primera sembrada, la veracruzana Daniela Garzón, por parciales de 6-0, 7-6 (7/3).

Por su parte, Ortiz, del Club Sierra Madre, y Burroni, del Alpino Chipinque, fueron superados por los máximos favoritos, los jaliscienses Abril Cárdenas y Jaime Gómez por 6-1, 6-2.

Los tenistas de Nuevo León tuvieron que enfrentarse a rivales en la cancha y fuera de ella, obstáculos que fueron resueltos por los padres de familia y coaches contratados por la ART para apoyarlos.

“Lo más importante es rescatar la gran voluntad y actitud de todos nuestros jugadores y staff técnico, todo esto de Nacionales Conade ha sido un objetivo cuesta arriba, una prueba de resistencia, más que de competencia”, indicó Marco Marín, presidente de la ART.

El equipo de Nuevo León tuvo que enfrentarse a situaciones extra cancha que afectaron su desempeño, como enfermedades, el calor de la sede y el desorden en la organización local.

“Fue un grupo de tenistas jóvenes, guerreros, entusiastas, comprometidos, que a pesar de las altas temperaturas, de dormir en hoteles no muy buenos, nunca dejaron de luchar por conseguir una medalla para su estado.

“Y unos papás que no dejan de apoyar a sus hijos y quienes al final terminaron haciéndose cargo de los gastos de alimentos y alojamiento, esto es un esfuerzo de los jugadores, del staff técnico y de los padres, así que ante tal situación estos bronces definitivamente saben a oro”, recalcó Marín.

Fuente: El Horizonte